Flores de calabacín y hojaldre

En esta ocasión, compartimos contigo una receta rápida y sencilla de flores de calabacín de hojaldre. Una preparación que, además de muy sabrosa, no necesita de demasiados ingredientes y, como podrás apreciar por ti mismo, es bastante llamativa debido a su preparación; por lo que admite que los rellenos que podamos incorporar dentro de las figuras de hojaldre sea bastante variado.

Lo único que tienes que hacer al respecto es echar a volar tu imaginación y comiences con la preparación de tus propias flores. Así, esta receta de flores de calabacín y hojaldre, sin duda, es ideal para asombrar a nuestros invitados, debido a su belleza y delicioso sabor.

¿Qué son las flores de calabacín y hojaldre?

Las flores de calabacín y hojaldre es un plato ideal para cumplir la función de entrada o; incluso, como un plato fuerte, sobre todo si va acompañado de alguna ensalada u otra preparación semejante. Como su nombre lo indica, es una receta elaborada, principalmente, con hojaldre y calabacines, pero también, como y hemos mencionado, se pueden añadir un buen número de ingredientes más, como lo es el salmón o el tomate.

Las flores de calabacín y hojaldre son una receta muy rápida y sencilla de preparar; ideal para prepararla con niños o para sorprender a cualquier invitado.

A continuación, te compartimos la que consideramos como la mejor receta de flores de calabacín y hojaldre. Anímate a prepararla:

Receta de flores de calabacín y hojaldre

A continuación, compartimos contigo los ingredientes y el modo de preparación de nuestra receta de flores de calabacín y hojaldre:

Ingredientes:

Vamos a necesitar:

• 1 Lámina de hojaldre (lo ideal es usar una lámina de forma rectangular).
• 1 calabacín mediano o pequeño, dependiendo de nosotros.
• Salmón, de preferencia, ahumado
• Queso crema del tipo Philadelphia.

Modo de preparación

Lo primero que tenemos que hacer es precalentar el horno a una temperatura de 180 grados centígrados; así, estará listo en el momento en que lo necesitemos.

Mientras éste se caliente, vamos a lavar el calabacín lo mejor posible; y hecho esto, procederemos a cortarlo en su totalidad en láminas lo más finas posibles.

Hecho esto, pasaremos a abrir completamente la lámina de hojaldre (extenderla) y la cortamos en tiras aproximadamente de 7 u 8 centímetros; siempre por la parte más corta de la lámina. Ya que hemos hecho esto, pasaremos a untar, con un cuchillo sin filo, el queso crema en el hojaldre previamente extendido sobre la mesa; encima de él colocaremos las láminas de calabacín haciendo que sobresalgan un poco en la parte superior del hojaldre, lo que finalmente mejorará la presentación de la receta.

Así mismo, debemos de cortar en láminas muy finas el salmón ahumado, el cual será el último ingrediente que colocaremos en la lámina, encima del queso philadelphia y del calabacín en trozos.

Ha llegado el momento de doblar poco a poco la tira de hojaldre con todos los ingredientes que hemos colocado encima. Debemos iniciar por la parte más extrema donde no hemos colocado nada; enrollando y apretando levemente de un extremo a otro de la lámina de hojaldre; así, debemos de procurar formar una flor o especie de rosa.

Haciendo lo mismo con la totalidad del hojaldre. Y después, colocaremos en un recipiente de vidrio o bandeja lo suficientemente amplio como para que todas las flores de calabacín y hojaldre tengan su lugar, sin tocarse entre ellas.

También podemos colocar cada una de las flores de calabacín y hojaldre en unos moldes para cupcakes o brownies; los cuales, para evitar que se peguen, colocaremos un poco de aceite de nuestra preferencia o de mantequilla (las podremos, entonces, desmoldar sin problema).

Una vez que hemos precalentado el horno a 180 grados centígrados, vamos a colocar la bandeja o los moldes en los que hemos colocado las flores de calabacín y hojaldre.

Depende de la intensidad con la que caliente nuestro horno, el tiempo puede variar desde los 20 a los 35 minutos; ten en cuenta esto. Sabremos que nuestro plato ha quedado listo cuando apreciemos que, en su parte exterior, las flores de hojaldre ya se encuentran doradas. Es entonces cuando debemos de retirar y apagar el horno.

Ahora, para consumir, sólo tenemos que dejar enfriar lo suficiente y saborear nuestras deliciosa preparación. Así mismo, este plato es bastante práctico y flexible; ya que puede consumirse tanto frío como caliente. Tú decides.

Trucos y sugerencias sobre la preparación de flores de calabacín y hojaldre

Un buen truco para conseguir una óptima preparación, es que la masa del hojaldre debe de emplearse, previo a la receta, cuando se encuentre fría. Para ello, podemos colocarla en la nevera hasta el momento en que tengamos pensado hacer la receta.

Para acompañar nuestra receta de flores de calabacín y hojaldre, podemos hacer una ensalada de hojas verde, con brotes; o bien, con tomate; sin duda, una preparación que va muy bien con las flores de hojaldre, tanto frías como caliente. Y que hará que, en cuestiones de nutrición, nuestro plato sea mucho más completo, perfecto para cualquier ocasión (ya sea como entrada o como plato fuerte).

Algunas sugerencias sobre su preparación son las siguientes:

Una vez que hayas formado los rollitos como flores, puedes mantenerlos durante un periodo máximo de 2 días en la nevera. Preferentemente, deben de encontrarse cubiertas con una campana de plástico  de cristal.

Si eres vegetariano, tienes la opción de simplemente añadir otros ingredientes en vez del salmón, como lo son las berenjenas o los tomates; los cuales van a la perfección tanto con los calabacines como con el hojaldre en sí.

Si lo deseas, así mismo, tienes la opción de cambiar el queso philadelphia por otros tipos de queso, igualmente sabrosos, como lo son el queso gouda o incluso el manchego, para un sabor un tanto más fuerte (y en este caso, hasta añadir un poco de jamón serrano en vez del salmón). Si bien debemos omitir más carne o proteína si ya consumiremos un plato fuerte que lleve algún producto de origen animal de este tipo.

Y hasta aquí esta receta, si quieres puedes ver estas recetas que también llevan calabacin.